lunes, 2 de mayo de 2016

LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA EN LO POLÍTICO Y LO ECONÓMICO

Asociación Internacional para la Gobernanza, la Ciudadanía y la Empresa
Asociación Internacional para la Gobernanza, la Ciudadanía y la Empresa
http://www.aigob.org/
 LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA EN LO POLÍTICO Y LO ECONÓMICO 
José Rafael Vilar, Consultor político
La Revolución Bolivariana fue un ciclo políticamente exitoso … que no supo correlacionarlo con el económico. El flujo muy amplio de ingresos fiscales consecuencia de las exportaciones se utilizó para redistribuirlo entre los menos favorecidos, reduciendo las brechas sociales … Pero, en contraposición, no se invirtieron recursos en hacer sostenible la economía… desarrollándola para poder hacer permanente la verdadera revolución: la de crear una importante clase media emergente.
«El estado interventor absuelve a la sociedad de su responsabilidad. […] A la gente la empobrecen para que luego vote por quienes los hundieron en la pobreza.» [transcripción de entrevista a Jorge Mario Cardenal Bergoglio Sivori, hoy Papa Francisco, atribuida al periodista Chris Mathews de la cadena MSNBC.]
El final de 2015 trajo cambios muy importantes en Hispanoamérica. Cuatro hitos en distintos países dieron fe de que los cambios que llegaban eran trascendentales: la victoria de Mauricio Macri Blanco en Argentina sobre la corrupción y la fuerte contracción económica que dejaban doce años de gobernar el kirchnerismo; el triunfo aplastante de la oposición en las elecciones parlamentarias en Venezuela, la segunda derrota significativa del chavismo —la primera fue cuando los electores denegaron en las urnas la reforma constitucional chavista de 2007— desde que en 1999 llegara a gobernar y la primera significante para cambios en el poder en Venezuela, país dentro de un espiral destructiva de crisis económica, corrupción, violencia y desinstitucionalización; la batalla entre el oficialismo —cada vez más disminuido— y un amplio espectro de la sociedad brasilera, oposición política incluida, como consecuencia de los cada vez más graves estructuras de corrupción desde el gobierno —federal, estatal y local— y sus instituciones con complicidad de un sector muy importante del empresariado —Mensalão (para compra de votos y adhesiones congresales en 2005), Máfia dos Sanguessugas (compras fraudulentas de mil ambulancias, 2006), Mensalão do DEM (Operação Caixa de Pandora, corrupción en el Distrito Federal, 2009) y Lava Jato (el petrolão coimas y sobreprecios con Petrobras)— que lleva al inicio del impeachment presidencial en Brasil —hecho político que podría marcar el final político de la presidente Dilma Vana da Silva Rousseff (salvaguarda hasta ahora de su antecesor y mentor), del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (quien podría terminar en la cárcel) y del Ciclo PT (Partido dos Trabalhadores, con graves indicios de beneficiarse con el esquema de corrupción de Petrobras)—, también consecuencia de corrupción y contracción económica galopantes. El cuarto es el descalabro del Partido Popular —y del Socialista Obrero también— en las elecciones generales en España con la consecuente imposibilidad para alguno de ellos de formar gobierno estable ya a las puertas de la convocatoria de nuevas elecciones, acompañado esto del surgimiento protagónico de dos fuerzas divergentes: el centrista Ciudadanos y el chavista Podemos, todo esto dentro de procesos centrípetos del Estado —Cataluña sobre todo pero también País Vasco, Galicia, Baleares, entre otros—. A estos hitos, en Bolivia se sumó en febrero pasado el rechazo a la reforma constitucional que le hubiera permitido al presidente Evo Morales Ayma su postulación para una posible tercera relección —aunque pudiera intentar otras opciones para repostularse—; también el presidente Rafael Correa Delgado anunció que no se presentaría en 2017 a otra relección en las elecciones generales del Ecuador —a pesar de que la Asamblea Nacional aprobó la reelección indefinida de cargos elegibles, gracias a la mayoría del oficialista Movimiento Alianza PAIS: 100 de 137 asambleístas—, decisión ésta que es la forma para Correa Delgado de evitarse capear las situaciones más álgidas que vendrán de la creciente difícil situación económica que está afectando su país por la caída de los precios del petróleo, su principal producto de exportación, y su excesivo gasto público —padecimiento generalizado del socialismo del siglo XXI— que le ha llevado a abrir a las transnacionales petroleras las zonas protegidas y de patrimonio indígena.
Una necesaria recapitulación para entender estos cambios
Después de la crisis de 2008 —incluso antes y durante ella—, Latinoamérica vivió el mayor y más prolongado ciclo de altos precios por sus commodities —gracias a las (entonces) insaciables importaciones de China, sobre todo, e India— y la mayor afluencia de capitales de inversión —primero huyendo de la contracción de las economías de EEUU y Europa y, además, motivados por las ganancias de los altos precios que beneficiaban a Latinoamérica entonces y, sobre todo inmediato al 2008, por el lento despegue de la economía norteamericana y el permanente estancamiento de la europea—, razones ambas por las que el período entre 2004 y finales del 2013 ha sido denominado como “la década maravillosa” o “la del big push”. Década que se inicia con mayoría de gobiernos marcadamente de centro y centro derecha y algunos pocos de izquierda o centroizquierda, cerrando el período anterior de administraciones neoliberales y sus privatizaciones del aparato económico estatal.
 Ubicados entre el centro y la derecha del panorama político latinoamericano, en 2004 se los encuentra detentando el poder en la mayoría de las administraciones de la Región: en México —Vicente Fox Quesada (Partido Acción Nacional, PAN)—, Guatemala —Alfonso Portillo Cabrera (Partido Republicano Institucional, PRI)—, Honduras —Ricardo Maduro Joest (Partido Nacional de Honduras, PNH)—, El Salvador —Francisco Flores Pérez (Alianza Republicana Nacionalista, ARENA)—, Nicaragua —Enrique Bolaños Geyer (Partido Liberal Constitucionalista, PLC)—, Costa Rica —Abel Pacheco de La Espriella (Partido Unidad Social Cristiana, PUSC)—, Panamá —Mireya Moscoso Rodríguez (Partido Panameñista [Arnulfista])—, República Dominicana —Hipólito Mejía Domínguez (Partido Revolucionario Dominicano, PRD)—, Haití —con el gobierno interino de Boniface Alexandre—, Colombia — Álvaro Uribe Vélez (Primero Colombia – Partido Liberal)—, Bolivia —Carlos de Mesa Gisbert (independiente – Movimiento Nacionalista Revolucionario, MNR)—, Paraguay —Nicanor Duarte Frutos (Asociación Nacional Republicana-Partido Colorado, ANR-PC)— y Uruguay —Jorge Batlle Ibáñez (Partido Colorado).
Por su parte, del lado de la izquierda y centroizquierda ese año sólo estaban siete países: Cuba —Fidel Castro Ruz (Partido Comunista de Cuba, PCC)—, Venezuela —Hugo Chávez Frías (Movimiento V República, MVR)—, Ecuador —Lucio Gutiérrez Borbú (Partido Sociedad Patriótica 21 de Enero – Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik, MUPP – Partido Movimiento Popular Democrático, MPD) —, Perú —Alejandro Toledo Manrique (Perú Posible)—, Chile —Ricardo Lagos Escobar (Partido por la Democracia, PPD) dentro de la Concertación de Partidos por la Democracia)—, Argentina —Néstor Kirchner Ostoić (Frente para la Victoria, FpV)— y Brasil —Luiz Inácio Lula da Silva (Partido dos Trabalhadores , PT). De éstos, Cuba, Venezuela y Argentina eran firmes seguidores del mentado socialismo del siglo xxi, mientras el PT de Brasil coqueteaba con ello —abordando casi con timidez competir el liderazgo de Chávez Frías desde la lógica de «O pais mais grande do mundo».
38-01
Fig. 1 Latinoamérica ideológica en 2004. (Elaboración propia.)
¿Pero qué es —casi podría decir “era”— el socialismo del siglo XXI? 
(Ver aatículo completo en  http://www.aigob.org/cambios-de-capitulos-con-grandes-capitulares/)
OTROS ARTÍCULOS
  1. La evolución de los modelos de gobernación: la gobernanza. Pero ¿qué es la gobernanza?
    La evolución de los modelos de gobernación: la gobernanza. Pero ¿qué es la gobernanza? Joan Prats (†) Académico y Consultor Internacional Sólo mediante la creación de estructuras y procesos sociopolíticos interactivos que estimulen la comunicación entre los actores involucrados y la creación de responsabilidades comunes, además de las individuales y diferenciadas, puede hoy asegurarse la

  2. Lo común, lo plural, lo público, y el tercer sector
    Lo común, lo plural, lo público, y el tercer sector José Mª Pascual Esteve. Director de Estrategias de Calidad Urbana. Un estado democrático necesita de una sociedad fuerte y plural, puesto que sólo es a través de las asociaciones, y no del estado, cuando se producen ciudadanos. Unos ciudadanos cuyos intereses van más allá de

  3. Tercer sector social y retos de futuro
    Tercer sector social y retos de futuro Àngels Guiteras Mestres Gerente ABD-ONG Gestora de políticas sociales Nuestra defensa de los derechos sociales y del papel del estado social nos ha de llevar hacia fórmulas innovadoras. La realización de los derechos sociales exige no restar sino sumar más derechos. Hoy es necesario reafirmar los derechos para

  4. El tercer sector social de Cataluña
    El tercer sector social de Cataluña Toni Codina Director general de la Taula d’entitats del Tercer Sector Social de Catalunya El Tercer Sector Social es el conjunto de entidades privadas sin afán de lucro que trabajan por la inclusión y la cohesión social, con especial atención a los colectivos más vulnerables de la sociedad. Forma

  5. Pobreza y Tercer Sector de Acción Social
     Pobreza y Tercer Sector de Acción Social[i]  Una visión desde la Red Europea de lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES) [ii] Carlos Susías Rodado Presidente de la Red Europea de lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español. Vicepresidente de la European Anti-Poverty Network.

  6. La Gobernanza en el 2025
    La Gobernanza en el 2025 José del Rosario Villamil Quiroz Investigador en Gobernanza Latinoamericana Uno de los ingredientes fundamentales de la cuarta ola de globalización, será la profundización del fenómeno de las economías emergentes. Estas se reconocen de esta manera, por la dinámica de incorporación de unos nuevos países al contexto del comercio internacional, ya

  7. Cambios de capítulos con grandes capitulares
     Cambios de capítulos con grandes capitulares  José Rafael Vilar Consultor político La Revolución Bolivariana fue un ciclo políticamente exitoso … que no supo correlacionarlo con el económico. El flujo muy amplio de ingresos fiscales consecuencia de las exportaciones se utilizó para redistribuirlo entre los menos favorecidos, reduciendo las brechas sociales … Pero, en contraposición, no

No hay comentarios:

Publicar un comentario